Intesa San Paolo

Para un banco como Intesa bien diseñadas y funcionales es determinante, sobre todo cuando una estructura espacial sana debe albergar operaciones sanas.

La distribución juega con la optimización del espacio y la “transparencia”: palabra que simboliza la apertura de la plaza al intercambio y a los negocios con el exterior, al tiempo que refleja en su interior el frenesí de la gran metrópoli. Las áreas para reuniones privadas de carácter confidencial se alternan con zonas públicas. 

El uso de materiales extraordinarios, como madera y gres porcelánico, los colores y los acabados de los revestimientos tienen la elocuente función de evocar un ambiente doméstico, abierto y acogedor.

En el proyecto, el mostrador se ha concebido como una figura totémica con fuerte elocuencia escénica que destaca su presencia, gracias también al color blanco que contrasta con los cálidos tonos naturales del entorno y que sirve de guía.